Ya, ¿para qué…?

No vengas

¿Ahora si tienes tiempo? Ya para qué, ¿Ahora sí quieres darme un abrazo? Ya para qué, deberías de secar ese llanto que tus ojos están derramando; es más, ni deberías estar aquí, ahora si vienes y quieres platicar, ahora sí te sobra tiempo para estar frente a una tumba por horas y horas

Sabes, me da tristeza el ver como estás, el ver que me lloras día tras día desde que me fui; me llamas en tus sueños, me buscas en cada fotos, en cada recuerdo, en cada ropa que usé, me llamas y dices que te hago falta, que no puedes seguir sin mí; eso me da tristeza

Veo que a veces ni apetito tienes y te estás dejando caer muy feo, no comes; no duermes bien, eso debe de cambiar porque ya no estoy, no se puede hacer nada; la vida tiene que seguir y tienes que aprender a vivirla sin mí, por más que llores, que te desveles, que me busques en cada rincón de tu hogar, no estaré físicamente

Ya me fui, debes aceptarlo; no vengas a llorar sobre un montón de tierra frente a una cruz; porque cuando estaba allá, no estuviste; ya no me hacen falta tus lágrimas, me duele; claro que me duele verte así, pero no hacen falta; hoy que soy invisible, haces lo que sea por verme y cuando fui visible, hacías todo lo contrario

No vengas llorando, necesito que seques tu llanto y sigas tu vida, no regresaré sólo porque hagas oraciones, debes tener tu conciencia limpia, te perdoné cuando partí; entendí que no tenías tiempo, que tenías cosas más importantes que hacer, que sólo ir a visitarme; entiendo y entendí que tu vida social iba en aumento y que no podías dedicarle algunos minutos de tu vida a quien lo anhelaba

Era más importante un estado en alguna red social, era más importante decir lo que hacías para que los demás vieran tu calidad de vida, hoy sólo miran todas esas fotos que compartes de las visitas que me has hecho; hoy soy importante y aunque sea tarde, te agradezco que ya tengas tiempo para mí

No tengo rencor, al contrario, tengo tristeza porque sé que lo que no hiciste cuando pudiste, quieres hacerlo ya que no se puede; te pedí un abrazo y encontré tu espalda, te pedí presencia y me diste ausencia, te pedí un beso y me diste un gesto, pero ¿sabes algo?; en cada foto, en cada recuerdo, ahí te dejé un abrazo, un beso, mis bendiciones, te dejé lo mas valioso que tuve para darte, mi corazón

No llores, no vengas llorando; ya no hay nada que remediar, simplemente tienes que aprender a vivir con lo que ha quedado, debes perdonarte porque eso es lo que te está aquejando tus días… 

A la próxima vez que tengas tiempo en venir a visitarme, no vengas llorando; que de nada sirve…

**Carlos Ramírez

Instagram.com/sebastian.sibego/

Un comentario en “Ya, ¿para qué…?

  1. Maravillosa reflexión, que verdad más grande, cuantas veces no dedicamos nuestro tiempo a quien nos necesita y nos reclama, vivimos en un mundo de prisas, ocupados en mil cosas, y no valoramos lo importante que es estar al lado de las personas que nos necesitan cuando nos piden nuestra ayuda.
    Que ironía, llorar a esas personas cuando ya no están, cuando en vida no les hemos dado lo que nos reclamaban y necesitaban de nosotros, nuestro tiempo, nuestro apoyo y carińo.
    Maravillosa reflexión, gracias 🙏🏻

    Me gusta

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: